Por nuestra COO Florencia Cattelani
En las semanas previas a Dreamforce, vimos cómo las redes sociales se llenaban de publicaciones sobre lo que Salesforce iba a presentar… los esperados agentes autónomos.
A lo largo de este año, Salesforce nos fue dando pistas sobre hacia dónde se dirige su estrategia. Durante los World Tours, presentaron la evolución de la Inteligencia Artificial, lanzaron Copilot y ahora, casi al final de 2024, ha llegado #Agentforce.
¿Por qué tantos anuncios este año? ¿Está Salesforce tratando de posicionarse como líder en el segmento de IA?
El mundo tecnológico no se detiene, y nosotros tampoco podemos.
Estamos entrando en la tercera ola de IA.
La primera ola fue la IA predictiva, que utiliza datos históricos para predecir acciones futuras, como sugerir el siguiente paso en una venta o recomendar contenido. Luego vino la IA generativa, con modelos como ChatGPT, que puede crear texto y contenido a partir de solicitudes humanas.
La tercera ola, que estamos comenzando a experimentar, será cuando los sistemas no solo puedan tomar decisiones y ejecutar tareas de manera autónoma, sino también reflexionar sobre ellas sin intervención humana. Esto es precisamente lo que Salesforce ha anunciado con Agentforce: una serie de agentes autónomos diseñados para diversos campos, desde las finanzas hasta el marketing, ventas y atención al cliente.
Estamos pasando de la generación de contenido a la automatización de acciones.
Durante 2024, Salesforce nos ha mostrado el camino. El tema clave de los World Tours fue la IA, impulsada por Copilot, pero sobre todo por Data Cloud, que marca un antes y un después. Durante años, hemos generado y almacenado datos en Data Lakes, tratando de obtener informes que expliquen ciertos comportamientos. Ahora es el momento de usar esos datos como combustible para desarrollar modelos de IA eficientes. Todo se trata de datos: hemos pasado de ver los datos como simples registros en tablas de bases de datos a explorarlos en formatos mucho más complejos, como bases de datos vectoriales o gráficos. Y ahora, gracias a la tecnología, podemos gestionar datos no estructurados en tiempo real, como imágenes, audios o videos, y convertirlos en fuentes de información valiosas sin un desarrollo extenso.
¿Significa esto que todas las necesidades de automatización se resolverán con Agentforce? ¿Va a reemplazar Agentforce a las herramientas RPA? La respuesta es no. Agentforce es parte de una evolución conocida como APA (Automatización de Procesos Agentes), que representa un avance sobre RPA (Automatización de Procesos Robóticos).
RPA (Automatización de Procesos Robóticos)
RPA es una tecnología que automatiza tareas repetitivas basadas en reglas emulando acciones humanas, como ingresar datos o hacer clic en botones. RPA no incluye IA avanzada ni capacidades adaptativas, pero requiere intervención humana cuando los procesos cambian o se vuelven complejos.
APA es la evolución de RPA, integrando IA y Aprendizaje Automático para automatizar tareas más complejas. APA no solo sigue reglas predefinidas, sino que también puede analizar datos no estructurados y tomar decisiones autónomas, lo que lo hace mucho más flexible y eficiente en procesos que requieren adaptabilidad, como el servicio al cliente o la identificación de fraudes.
Diferencias clave:
- RPA: Ideal para automatizar tareas repetitivas y estructuradas, donde no se requiere una toma de decisiones compleja.
- APA: Utiliza IA y Aprendizaje Automático para automatizar tareas dinámicas, adaptándose a situaciones imprevistas y proporcionando análisis en tiempo real para optimizar procesos.
Con Agentforce, Salesforce lleva la automatización a un nuevo nivel, introduciendo agentes autónomos que combinan lo mejor de la IA generativa y predictiva con avanzadas capacidades de automatización. Aunque no reemplaza completamente a las soluciones RPA, ofrece una herramienta más poderosa y flexible para los procesos que requieren un mayor grado de inteligencia y autonomía.
En resumen, Agentforce es una clara apuesta por el futuro de la automatización inteligente, permitiendo a las empresas no solo mejorar la eficiencia operativa, sino también evolucionar sus procesos con agentes capaces de tomar decisiones y aprender sobre la marcha. Este es solo el comienzo de una nueva era en la que los datos y la IA trabajarán juntos para transformar radicalmente la manera en que hacemos negocios.