Por nuestra CPO, María Malter Terrada

Agentforce nos invita a reflexionar sobre algo que va más allá de la tecnología: el papel clave que juegan las habilidades blandas en un entorno donde la personalización y la experiencia del usuario son el centro de atención.

La última gran actualización de Salesforce representa una revolución en personalización y automatización de procesos. Impulsada por agentes autónomos de inteligencia artificial (IA), esta solución gestiona tareas de manera independiente, optimizando áreas clave como ventas, servicio al cliente y marketing. Es un cambio que redefine cómo trabajamos y entregamos valor, no solo para nuestros clientes, sino también para los usuarios finales.

Pero aquí es donde entra en juego algo que ninguna herramienta puede reemplazar: el toque humano.

Equilibrio entre Tecnología y Humanidad

En Cloudgaia, lo vemos todos los días. Los proyectos exitosos no solo requieren expertos técnicos que puedan configurar y optimizar plataformas; también necesitan profesionales que sepan escuchar, empatizar y traducir las necesidades del usuario final en soluciones reales y efectivas.

La personalización no se trata solo de algoritmos. Se trata de comprender profundamente lo que cada usuario busca y cómo quiere sentirse mientras usa la solución. Aquí es donde las habilidades blandas se convierten en un diferenciador clave para construir experiencias personalizadas que realmente añadan valor.

Tecnología con Propósito, Impulsada por Personas

En un ecosistema como el de Salesforce, donde la tecnología evoluciona rápidamente, estas competencias tienen un impacto directo:

  • Construir relaciones basadas en la confianza con los clientes, fundamentadas en la colaboración y el entendimiento mutuo.
  • Entender al usuario final: la personalización efectiva no es solo un algoritmo; es una interpretación humana que conecta los datos con experiencias reales.
  • Adaptarse al cambio: en un entorno dinámico como Salesforce, la capacidad de aprender y evolucionar es tan importante como el conocimiento técnico.
  • Liderar con propósito: la tecnología puede guiar procesos, pero las personas le dan significado y dirección.
  • Fomentar equipos diversos y colaborativos, capaces de transformar ideas en resultados tangibles.

Agentforce nos recuerda que la transformación digital no es solo un desafío técnico; también es un desafío humano. Impulsar proyectos exitosos requiere tanto tecnología de punta como profesionales preparados para conectarse de manera auténtica con los usuarios.

Estoy convencida de que los Recursos Humanos tienen un papel interesante que desempeñar en acompañar y potenciar estas habilidades. En Cloudgaia, fomentamos una cultura de avance constante e innovación, donde nuestros equipos son motivados a romper barreras, experimentar con nuevos enfoques y adoptar tecnologías de vanguardia. Esta mentalidad nos permite crear soluciones transformadoras mientras nos mantenemos ágiles y responden a las necesidades únicas de nuestros clientes y sus usuarios.

La tecnología, como Agentforce, nos proporciona herramientas poderosas, pero su verdadero valor radica en cómo nos ayuda a ser más humanos: más empáticos, más creativos y más sintonizados con las necesidades de quienes nos rodean.

En Cloudgaia, creemos que el equilibrio entre la innovación tecnológica y el propósito humano no sólo transforma las organizaciones, sino que también enriquece la forma en que vivimos y trabajamos. Porque, al final, la tecnología es solo el medio; siempre seremos el objetivo final.